Estos pendientes están inspirados en la simplicidad del arte japonés, particularmente en una corriente estética denominada wabi-sabi (わび・さび) que combina el minimalismo con la naturaleza, aunque estas piezas no comparten el principio de asimetría predominante en dicho estilo.
Se componen de cuentas de cristal Miyuki, fabricadas en Japón y en la misma línea de sencillez recibe el nombre de Shiro que significa blanco.
Para aquellos amantes del arte japonés les recomiendo este maravilloso libro, con un precio asombroso dada la calidad de la edición:
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Ukiyo -E
Editorial: Edimat
